En regiones como la península de Yucatán se están desmontando terrenos forestales en cuestión de meses para actividades agrícolas. La tala ilegal sigue creciendo en México y está vinculada con otras conductas delictivas, afirmó Mariana Boy Tamborell, procuradora federal de Protección al Ambiente (Profepa), quien advirtió que zonas como Ocuilan, en el Estado de México, presentan niveles críticos de afectación forestal.